Estimados compañeros.
Todos pensábamos que este año podríamos reunirnos el 1 de junio para recordar el día de La Aduana y del trabajador aduanero. Pero estos 435 años de existencia nos encuentra nuevamente sin poder festejarlo como lo habíamos pensado. Preparando a la Mutual para recibir a sus invitados. Dios lo quiso así y esperemos que llegue los tiempos de normalización, rogando que sea pronto. En esta oportunidad quiero trasmitirles lo importante que es para un país el funcionamiento de la aduana, un organismo del estado que cumple un rol preponderante en la actividad del comercio exterior como así también en la represión del contrabando y el narcotráfico. Se eligió el 1 de junio de 1586, por los registros contables de ingresos por derechos de importación, desde aquel entonces los reportes económicos por parte de la aduana resultan indispensables para solventar los servicios públicos. La regulación de la actividad aduanera necesita que los hombres y mujeres que la componen, deben contar con las herramientas necesaria y los cuidados indispensables por el alto grado de exposición a los que son sometidos.
El Consejo Directivo quiere brindar este pequeño homenaje, en este día tan especial, a todos aquellos que están enfrentando la pandemia en la primera línea, cumpliendo con su deber en los lugares más inhóspitos, en la alta montaña, los puertos, el aeropuerto de Ezeiza, los puentes internacionales, en fin, en todos los espacios donde el servicio aduanero deba estar presente. También agradecer infinitamente a aquellos que nos hicieron llegar mediante fotos y videos de distintas jurisdicciones, las que fueron incorporadas al nuestro.
A esta altura de los acontecimientos que estamos viviendo, busquemos el equilibrio emocional y comencemos a soñar que el próximo año podremos vernos, y que este tiempo de aislamiento aprendimos de la importancia de juntarnos de volver a lo social que es lo que necesitamos. La amistad y la comunicación pareciera que al unirse forman una unidad mística que los seres humanos necesitamos.
Feliz día y será hasta siempre
Guillermo F. Potenza, Presidente de AEANA